INGENIERÍA, LOGÍSTICA y EMPRESA

Dentro de nuestra profesión, uno de los campos en los que actuamos es la logística. A menudo, quien es ajeno al ramo, piensa que esto se refiere al trabajo de las agencias de transporte, quien ha tenido algo de experiencia empieza a pensar en la gestión de stocks, pero la logística va mucho mas allá y que es crítica, basta ver que en su origen etimológico del francés, logistique a través del inglés, logistics, este término se refiere a la parte militar que se encarga del transporte, alojamiento y aprovisionamiento de las tropas en campaña.

En España todas las empresas tienden e internalizar sus servicios que podríamos denominar logísticos primarios, o básicos, entendiendo por tales los que se refieren al aprovisionamiento y a la preparación de pedidos, dejando la mayoría en manos de terceros el envío. Todas las empresa que fabrican o comercializan un producto, no las de servicios, tienen en su estructura necesidades logísticas de las que hemos denominado básicas, que tendrán un mayor o menor peso, según la actividad y el producto, pero que resultan criticas.

Nuestro papel como ingenieros en organizar estos flujos va mas allá de lo que alguien con mas experiencia podría entender por logística y que verdaderamente se acerca más a las derivadas de su significado etimológico, ya que al condicionar esta estructura la operativa del resto de la empresa, es necesario tener una visión del resto de fases, y de igual manera porque esta operativa se ve condicionada por el resto de flujos de la empresa. Que a nadie extrañe que muchos de los puestos directivos de las empresas estén ocupados por ingenieros industriales que precisamente provienen de organizar dentro de su organización el aspecto logístico primario, y que dedican su siguiente etapa en la organización a gestionar la logística de alto nivel, es decir, el resto de todos los procesos de la empresa, incluso comercial, financiero-monetario, informático-tecnológico, calidad, etc.

La racionalización de los flujos de proceso, se puede aplicar a procesos físicos, como es el movimiento de mercancías, pero también a procesos lógicos, como es la gestión y la organización de empresas. En el encuento de estros tres ambitos, la ingeniería y los ingenieros industriales somos determinantes en cualquier organización. La gestión de estos flujos, entendida no sólo por la optimización de costes, sino de tiempos, de riesgos, de incertidumbres, de interlocutores y de necesidad de controles, es lo que debemos perserguir diariamente como profesionales en nuestro ejercicio cotidiano, y lo que nos distingue y se nos reconoce, frente a otros profesionales que aspiran a desempeñar papeles similares y a los que les pesa en muchas ocasiones una perspectiva parcial, o muy centrada en su área de conocimiento.